La imagen la extraje de acá: el diario de GregEste trimestre, en el currele, me toca llevar la zona de biblioteca. Eso está bien, porque, además, de dirigir la actividad semanal de ese espacio, te ofrece la oportunidad de poder sentarte más a menudo a leer los libricos y cómics que allá tenemos. Así, los/as niños/as te ven y les da por sentarse a leer contigo o, simplemente, se interesan por tu lectura y, al rato, te hablan de sus cosicas.
Pues bien, estos días me he leído Diario de Greg. Un pringao total y Diario de Greg 2. La ley de Rodrick, de Jeff Kinney. Son dos libros, acompañados de ilustraciones a modo de cómic, en los que Greg, en su Diario, nos cuenta sus desventuras. Sí, todas las ideas absurdas que se le ocurren, la relación con su familia, los chandríos que monta (y que siempre le acaban pillando), los chalados con los que se junta y su poco éxito con las chicas... Y lo hace de un modo realmente divertido, tanto en el texto como en los dibujos.
En teoría, está escrito para niños/as de 11 a 14 años, pero es tan gracioso que, mientras lo lees, no para de aparecer esa típica mueca de sonrisilla alegre que se te pone cuando algo te divierte. Sin duda, una lectura recomendadísima si quieres pasar un buen rato y echarte unas risas.
Pues bien, estos días me he leído Diario de Greg. Un pringao total y Diario de Greg 2. La ley de Rodrick, de Jeff Kinney. Son dos libros, acompañados de ilustraciones a modo de cómic, en los que Greg, en su Diario, nos cuenta sus desventuras. Sí, todas las ideas absurdas que se le ocurren, la relación con su familia, los chandríos que monta (y que siempre le acaban pillando), los chalados con los que se junta y su poco éxito con las chicas... Y lo hace de un modo realmente divertido, tanto en el texto como en los dibujos.
En teoría, está escrito para niños/as de 11 a 14 años, pero es tan gracioso que, mientras lo lees, no para de aparecer esa típica mueca de sonrisilla alegre que se te pone cuando algo te divierte. Sin duda, una lectura recomendadísima si quieres pasar un buen rato y echarte unas risas.
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