Nos juntamos, este Domingo, los habituales del cine forum dominguero. Después de unas cuantas películas seguidas que se iban enlazando por el personaje común de Bela Lugosi: Ed Wood, Plan 9 from outer space y El ladrón de Cadáveres, tocaba cambiar de registro. Como el Jueves visualicé Mi nombre es Harvey Milk, propuse una película del mismo director: Elephant, aquella que hablaba de la matanza de Columbine.
La había visto, en el año que la proyectaron, en el cinema. Allá me gustó, así que supuse que sería una buena oportunidad para volver a verla. Las opiniones fueron dispares. Iban desde "un peñazo", a "lenta" o, como a mí, una "película muy interesante". A mí, volvió a gustarme, pues me parece genial la manera de presentarnos la situación. Las razones:
1) Se nos presenta como un día banal, en el que no ocurre absolutamente nada más allá de lo que les va sucediendo (que es de lo más anodino), a los protagonistas.
2) Cada uno de estos personajes es presentado de manera muy reducida, pero se intuyen sus situaciones: padre con problemas con el alcohol; marginada y ridiculizada por su físico; adolescentes bulímicas que se toman a guasa su problema; atleta "tonto" que, quizás, no lo es; quillos que sufren las burlas de sus compañeros... Preocupaciones, todas ellas, que se presentan en nuestra sociedad (aunque las hay muchas más).
3) El punto de vista, tras la nuca, de espaldas, cerrando el plano... como en el videojuego con el que están los quillos que luego perpetrarán la matanza, despersonalizando, así, a las futuras víctimas. Quizás, borrando así la importancia que le dan a su vida los asesinos.
4) El cielo que se va encapotando a medida que nos acercamos al desenlace.
Lenta, quizás, porque no estamos acostumbrados a visualizar una película que nos presenta que, a lo largo de nuestros días, muchos de ellos transcurren en "la normalidad" y que, en muchas ocasiones, eso no nos llama la atención. Aburrida, para nada. Y es que crea un clima de tranquilidad y de tensión al mismo tiempo, hasta que llega al final y ¡zas! Vuelve a sorprender. La matanza, fría, sin sensiblería ni dramatismo. Simplemente, pasillos, disparos, y jóvenes que matan y mueren.
Sin duda un film que presenta una situación tan dramática de una manera distinta. Sin duda, una película que aconsejo ver, porque, buena o mala, nos provocó un amplio debate.
La había visto, en el año que la proyectaron, en el cinema. Allá me gustó, así que supuse que sería una buena oportunidad para volver a verla. Las opiniones fueron dispares. Iban desde "un peñazo", a "lenta" o, como a mí, una "película muy interesante". A mí, volvió a gustarme, pues me parece genial la manera de presentarnos la situación. Las razones:
1) Se nos presenta como un día banal, en el que no ocurre absolutamente nada más allá de lo que les va sucediendo (que es de lo más anodino), a los protagonistas.
2) Cada uno de estos personajes es presentado de manera muy reducida, pero se intuyen sus situaciones: padre con problemas con el alcohol; marginada y ridiculizada por su físico; adolescentes bulímicas que se toman a guasa su problema; atleta "tonto" que, quizás, no lo es; quillos que sufren las burlas de sus compañeros... Preocupaciones, todas ellas, que se presentan en nuestra sociedad (aunque las hay muchas más).
3) El punto de vista, tras la nuca, de espaldas, cerrando el plano... como en el videojuego con el que están los quillos que luego perpetrarán la matanza, despersonalizando, así, a las futuras víctimas. Quizás, borrando así la importancia que le dan a su vida los asesinos.
4) El cielo que se va encapotando a medida que nos acercamos al desenlace.
Lenta, quizás, porque no estamos acostumbrados a visualizar una película que nos presenta que, a lo largo de nuestros días, muchos de ellos transcurren en "la normalidad" y que, en muchas ocasiones, eso no nos llama la atención. Aburrida, para nada. Y es que crea un clima de tranquilidad y de tensión al mismo tiempo, hasta que llega al final y ¡zas! Vuelve a sorprender. La matanza, fría, sin sensiblería ni dramatismo. Simplemente, pasillos, disparos, y jóvenes que matan y mueren.
Sin duda un film que presenta una situación tan dramática de una manera distinta. Sin duda, una película que aconsejo ver, porque, buena o mala, nos provocó un amplio debate.
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